¿Por qué un colchón pierde firmeza y se deforma?

Existen diversas razones por las cuales un colchón puede perder firmeza y, como consecuencia, deformarse. Aunque se utilice principalmente para dormir, muchos desconocen los factores que afectan su estado y su capacidad para brindar un descanso óptimo.

¿Cuáles son los motivos detrás de la pérdida de forma de un colchón?

• Degradación con el tiempo: Con el paso de los años, la composición original del colchón se degrada, perdiendo la firmeza que tenía en sus primeros años de vida.
• Movimiento de resortes: La falta de estabilidad puede causar que los resortes se desplacen, afectando la distribución de la presión y comprometiendo su soporte adecuado.
• Uso inadecuado: Saltar sobre el colchón o ejercer demasiado peso en áreas específicas puede provocar deformidades irregulares a lo largo del tiempo.
• Falta de higiene y humedad: La humedad o la falta de higiene pueden afectar la capacidad del colchón para ventilar correctamente, impidiendo que recupere su forma original.

Además, otro factor a considerar es la inadecuación del colchón en relación al peso o tamaño de la persona que lo utiliza.

Los colchones requieren cuidados especiales, especialmente en entornos como hospitales u hoteles, donde la higiene es crucial al cambiar de paciente o huésped. En términos generales, la vida útil promedio de un colchón es de alrededor de 10 años. Es esencial estar al tanto de cuándo es el momento adecuado para reemplazarlo, ya que con el tiempo, pierden firmeza y su forma original.

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