Las almohadas sirven para mantener tu cuerpo en una posición neutral. Usar un buen cojín evita tensiones, favorece el descanso placentero y te ayuda a levantarte sin dolores de cuello, cabeza y/o espalda.
Existen ciertos tipos de almohadas reconocidas por su tecnología y beneficios para el descanso. Sin embargo, la elección de la almohada debe adaptarse a estándares personalizados. Cada persona puede querer o necesitar una almohada específica según sus preferencias o necesidades funcionales.
Factores como la altura y ancho de la persona, su edad, postura al dormir, presencia de ronquidos, gustos y preferencias, son importantes al momento de elegir una almohada funcional.
Una almohada saludable debe tener las siguientes características:
- Debe permitirte dormir en una posición cómoda.
- Debe ayudarte a liberar tensiones y a levantarte sin dolores corporales.
No debe generar alergias. - Su tacto debe resultar agradable.
Tipos de almohadas
La almohada ideal según su relleno
Las almohadas pueden estar rellenas incluso con pétalos de rosas. Sin embargo, en esta ocasión, compartiremos tres de los materiales más comunes utilizados en su confección.
En primer lugar, las almohadas de fibra, elaboradas con material sintético, son aptas para personas muy alérgicas. Al escogerlas, considera su nivel de firmeza y tamaño, ya que hay una amplia variedad al respecto.
Las características principales de las almohadas de fibra son:
- Son ligeras.
- No absorben la humedad.
- Fáciles de lavar.
- Variedad en tamaño y firmeza.
- Económicas
Otra opción son las almohadas rellenas de espuma viscoelástica, recomendadas para personas con dolores cervicales. Sus características principales son:
- Se adaptan a la forma del cuello.
- Regulan firmeza y altura según el peso de la persona.
- Son frescas y mantienen la temperatura.
- Tienen memoria inteligente, recuperando su forma original.
- Algunas tienen una capa de gel para personas calurosas.
- Pueden venir forradas en tela jacquard, colaborando con el relax.
Finalmente, las almohadas de plumas, únicas en su relleno de material natural, son ideales para quienes buscan suavidad y confort.
Sus principales características son:
- Mayor durabilidad.
- Mayor costo.
- Frescura.
- Baja firmeza.
- Dificultad para lavar, ya que no pueden meterse directamente en el lavarropas.
En función de la postura al dormir:
- Para dormir boca abajo: almohadas bajas y de poca firmeza.
- Para dormir boca arriba: almohadas intermedias en grosor y firmeza.
- Para dormir de costado: almohadas altas y de mayor firmeza.
Considerando que la almohada está relacionada con posturas y contexturas, se recomienda evitar compartir o intercambiar almohadas. En el caso de parejas, es fundamental que cada uno tenga la suya, diferenciadas claramente.
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